HIPERSOMNIAS

La importancia del descanso y la influencia que tiene sobre nuestra vida diaria es algo que está demostrado.

Y aconsejar y dar pautas para una buena rutina de descanso, siempre son de utilidad para los pacientes. Ayuda a tenerlos como una herramienta imprescindible para fomentar un cambio, rutinas…

La falta de sueño interfiere de manera negativa en la vida de cualquier persona, como es el caso del insomnio.  Pero al igual que la falta de sueño y de un descanso reparador, tienen una interferencia negativa en la vida diaria de la persona, también lo tienen un exceso de horas de sueño y una somnolencia diurna tras una noche con sus 8 horas de sueño, supuestamente reparador. Y este es el caso de lo que denominamos hipersomnias.

Lo primero que tenemos que tener claro es lo siguiente, la diferencia entre una persona que es «dormilona» y una persona con hipersomnia.

Entonces, ¿Cómo podemos saber si un paciente podría tener una hipersomnia? Para considerar si es el caso, es lo siguiente: si el paciente pese a conciliar el sueño sin problemas y sin interrupciones, duerme las horas recomendadas de sueño (8 horas) y con rutina y horarios normales, pero su sueño no es reparador. Se despiertan cansados, y tienen una continua sensación de somnolencia durante el día.  Hasta el punto de necesitar reposar la cabeza unos minutos, debido a la intensa sensación de cansancio. Da igual lo que duerman, siempre tienen sueño.

Y ahora puede que te preguntes ¿Qué es lo que caracteriza a un dormilón? Pues es sencillo, una persona que disfruta y le gusta, por ejemplo: echarse una buena siesta.

 ¡Y ahora podemos diferenciar una persona con hipersomnia, de un dormilón!

Como todo en la vida los excesos son malos, y aunque en el caso de dormir, es verdad que generalmente el intervalo que nos da el despertador entre alarma y alarma… o esos días en los que hay unas horas más para estar en la cama se aprovecha ¿Verdad?